Este año 2017 se cumplen 150 años de su muerte. Enrique Granados fue hijo de Calixto Granados Armenteros y de Enriqueta Elvira Campiña. El padre había nacido en la entonces provincia española de Cuba, y era capitán del ejército de Navarra. Elvira había nacido en Santander (Cantabria).
Enrique Granados nació en Lérida el 27 de julio de 1867, donde su padre se encontraba destinado en ese momento, pero poco después la familia se trasladó a Canarias al haber sido nombrado el padre Gobernador Militar de Santa Cruz de Tenerife. Los Granados permanecieron allí tres años y medio, que fueron suficientes para dejar una huella indeleble en el pequeño Enrique. Granados recordaría en años sucesivos con inmenso cariño aquel tiempo en Canarias, refiriéndose frecuentemente al huerto de naranjos y limoneros que veía desde su ventana de su casa como “el paraíso de su infancia”.
En 1874 su padre sufrió un grave accidente al caerse de su caballo, y las complicaciones de salud surgidas a raíz del percance llevaron a la familia a trasladarse nuevamente a la Península, esta vez a Barcelona. La familia se afincó inicialmente en el Carrer Fenosa, y posteriormente en el paseo de Grácia. Para entonces Enrique ya denotaba una clara inclinación hacia la música, que sus padres estimularon con la ayuda de un compañero de su padre, el capitán José Junqueda, quien dio al jovencísimo Granados sus primeras lecciones de piano y solfeo. El progreso de Enrique era tan rápido que sus padres buscaron enseguida la manera de proporcionar al muchacho estudios musicales más formales.