El libro cuenta la historia de una chica de unos ocho años de edad llamada Ana, que tuvo que huir de su país por culpa de ese señor tan feo de bigote negro llamado Hitler.
Ana vivía en Berlín, poseía una amplia casa, su padre era un escritor muy reconocido en toda Alemania y su madre se ocupaba de las tareas del hogar, además tenía un hermano, su nombre era Max.
Todo su mundo se vino abajo cuando en las elecciones ganó el señor del bigote, un señor, por llamarlo de alguna manera, que odiaba a los judíos y a todas aquellas personas que tuvieran pensamientos distintos a los suyos.
El padre de Ana además de ser judío era alguien que iba en contra de las ideas de Hitler, por lo que debido al miedo que tenían, toda su familia huyó a Suiza, hasta que se le acabaron los recursos.
Luego marcharon a París, y con un idioma difícil de aprender para dos críos. De Francia tuvieron que marcharse tras dos primaveras observando sus hermosos Campos Elíseos, debido a la falta de trabajo de su padre. Además creían que tendrían más oportunidades comenzando una vida nueva en Londres, donde al final acabaron, y donde Ana pudo vivir anécdotas para su recuerdo y para su vida.
Judith Kerr, autora del libro.
OPINIÓN:
Me resulta un libro maravilloso, ya que el autor relata la historia con los pensamientos de una niña, que son más cómicos, inocentes e incluso más sabios que los de un adulto.
El título de esta novela puede resultar interesante, y tiene una explicación muy coherente y sabia, esto es algo que me llamó mucho la atención ya que utiliza un tipo de metáfora, para expulsar muchos pensamientos ocultos.
Es un libro sencillo de leer. Lo recomiendo ya que aunque esté contado de manera quizás más “ infantil” que por ejemplo El diario de Ana Frank, es divertido y a la vez intrigante.
Esta clase de libros me gustan bastante ya que mediante la literatura, podemos sentir empatía por aquellas personas que lo pasaron tan mal en estos tiempos, y aprender de los errores del pasado para no cometerlos en el futuro.
CLAUDIA RAMOS, 2º C